jueves, 23 de diciembre de 2010

Ella

Te acercas lenta y pausadamente…
Imposible de creer pero con una mirada atrapas mi existencia,
Inmóvil a tu encanto, con beso profanás mi respiración,
Inyectas en mi torrente sanguíneo esa cruel adrenalina de este amor,
Que es un vicio pecaminoso…
Envuelto entre paños de seda y luces de neón,
Marginado en el encierro de nuestros cuerpos,
Perdidos vertiginosamente entre pecados de la carne,
Escucho susurrar a mi oído tu respiración…

Hermosa, única, risueña, malvada, artista…
Un conjunto infinito de cualidades latiendo es un corazón mortal,
Cómo es que atrapas mi deseo en esa suave seducción de tus besos,
Y me dejas partir en la mañana, desnudo de emociones profundas,
Ya que me las has robado todas con la llegada de la noche próxima pasada,
Tu cara de ángel fijando mi perfil de obsecuente,
Esclavo de belleza camino como muerto vivo entre los cimientos de este cuento,
Porque al dejarte cada día…
Mi alma se espeja en un desierto austero,
Implorando por ver tu sombra llegar en algún momento,
Que quizá sería mendigar la llegada de lo incierto,
Pero no tengo orgullo de estúpido entre las redes de tu templo,
Que es mi refugio… mi lugar… mi casa… que es nuestro…

Entonces…
Dame la mano hoy, saltemos al vacío sin miedo…
Prometo que voy a cuidarte mientras vamos cayendo,
Estira tu mano hacia mi… no ves?
Estoy llorando…
Y no es porque algo me lastime si no porque... entiendo nacimos muriendo,
Entonces no tengo miedo de arriesgar,
Pero si le temo a estas muchas horas que separan nuestro encuentro…
Qué extraña, peligrosa pero hermosa sensación,
Puedo tocar un arpa con las yemas de mis dedos,
Mientras pienso en lo hermosa que eres…. Mientras te espero…

Vení!
Llevate lo que es tuyo!
Vení!
Besame y con ese beso…
Llevate lo que es tuyo… mi credo, mi vida y mi aliento….

No hay comentarios: